"Le expliqué que somos de la idea de que esta cuestión debe ser dejada en el campo de los historiadores y no debe ser utilizada como un instrumento político", dijo Erdogan, según informó la agencia de noticias italiana ANSA.
Otros medios turcos informaron que el mandatario tuvo la oportunidad de decirle "que somos muy sensibles a las infundadas acusaciones armenias". "Quiero enfatizar que el Papa muestra una actitud prudente al respecto", agregó Erdogan. El Vaticano no informó que se haya tocado el tema. Las oficinas de prensa de ambos líderes centraron la atención en las discusiones sobre el conflicto entre Israel y Palestina y la crisis de refugiados en Medio Oriente.
La relación entre Turquía y el Vaticano se volvió tensa luego del reconocimiento del Genocidio Armenio por parte del pontífice argentino, que continuó la línea del Papa Juan Pablo II, quien lo reconoció oficialmente en el año 2000. Luego de varias ocasiones donde el Papa argentino nombró el Genocidio Armenio, Turquía retiró su embajador del Vaticano en 2015 y Erdogan insultó al Papa Francisco al declarar que decía "estupideces". Luego de su viaje a Armenia en 2016, el Papa reconoció que hubo presiones dentro del Vaticano para que no use la palabra genocidio en sus discursos.
