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Dr. Alfredo Abriani, Director General de Cultos de la Ciudad de Buenos Aires |
"Cuando asumo esta Dirección, me veo en la necesidad de tener un asesor en Islam y consulto a las autoridades del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA) y Samir Salech, el Presidente de la institución en ese momento -fallecido-, me recomendó a una persona que por sus conocimientos pudiera cumplir ese rol". Abriani explicó que Augusto Kumvich ingresó como asesor a la planta permanente del personal del Gobierno de la Ciudad, previo contrato de locación de servicios durante casi un año. Más adelante y consultado sobre la familia que formaron dicho asesor -actualmente en funciones- y la directora del Centro de Diálogo Intercultural Alba, el funcionario comentó que "se conocieron en el trabajo y que terminaron casándose" y afirmó que el asesor "ni siquiera pertenece al Movimiento Gülen".
Alfredo Abriani manifestó también su preocupación sobre el párrafo del libro donde se describen los viajes a Turquía a los que son invitados distintas personas, desde funcionarios de distintos niveles, formadores de opinión, y aclaró que su viaje a Estambul no constituyó ningún compromiso de su parte y aseguró que fue una invitación con el pasaje pago, pero no así la estadía. "Sé que habitualmente ellos pagaban todo, pero en este caso y por una cuestión de financiamiento del Movimiento, el alcance de la invitación sólo incluía el pasaje".
"Hubo una evaluación de mis superiores de costear la estadía de un funcionario para capacitarse y para poder desarrollar después un trabajo en la Ciudad de Buenos Aires ya sea con la comunidad islámica de Buenos Aires o en el tema del Diálogo Interreligioso" actividad a la que está abocada la Dirección General de Cultos. Finalmente aseguró que nunca los escuchó negar el Genocidio Armenio y que el tema no fue ocultado en ningún momento durante el viaje a Turquía.
El libro de Pablo Kendikian, con prólogo del profesor de Relaciones Internacionales Khatchik DerGhougassian y editado por CICCUS, describe la metodología, el accionar y la ideología de este Movimiento -también denominado Hizmet- que opera además de Turquía, en 140 países con una presencia de más de 1500 colegios y distintas instituciones satélites creadas para desarrollar una estrategia prolijamente diseñada según el lugar donde deciden instalarse. El libro cuestiona a las autoridades nacionales por dar una inscripción de entidad religiosa a un poderoso e influyente Movimiento que como se demuestra en el libro, "trabaja políticamente y que se escuda bajo el manto de la religión y del diálogo interreligioso que dicen defender, lugar desde donde se dificulta cuestionar su trabajo" según palabras del autor.