El canciller de Turquía, Ahmet Davutoglu, visitó Ereván, en lo que constituye la primera visita de un funcionario turco a Armenia en cinco años, y se reunió con su homólogo armenio, Edward Nalbandian. El objetivo formal de la visita es asistir a la 29º reunión del Consejo de la Cooperación Económica del Mar Negro (BSEC).
En el encuentro, Nalbandian reiteró que la apertura de la frontera entre ambos países no debe estar ligada a ninguna precondición unilateral.
Tras las críticas al Canciller turco por no visitar el Tsitsernakaberd, el memorial del Genocidio Armenio, el politólogo Giro Manoyan opinó que la visita de Davutoglu a Armenia era una estrategia para crear la ilusión de que hay avances en la normalización de las relaciones entre ambos países, de cara al centenario del Genocidio Armenio que tendrá lugar en 2015.