El Partido Republicano del Pueblo (CHP), principal opositor del oficialista Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), fue el anfitrión del Consejo de la IS del que participaron los políticos argentinos Hermes Binner, presidente del Partido Socialista, la diputada nacional Alicia Ciciliani por el mismo partido, Marcelo Stubrin y Jesús Rodríguez, por la UCR y el vicepresidente de la IS, el argentino Mario Nalpatian, como representante de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA).
El Consejo de la IS emitió diversas declaraciones y resoluciones, haciendo énfasis en los conflictos que atraviesan los países de Medio Oriente. En especial, se hizo una fuerte crítica al "uso desproporcionado de la fuerza" ordenado por las autoridades de Turquía frente a las manifestaciones pacíficas de la sociedad civil, que causaron "la muerte de una cantidad de jóvenes". "La IS recuerda que el continuo encarcelamiento de miembros electos del Parlamento turco entra en contradicción directa con la propia noción de democracia y constituye una violación al derecho de las personas de elegir y ser electos", se agregó.
En este sentido, Mario Nalpatian afirmó "que la política exterior de Turquía no ha contribuido al afianzamiento de la estabilidad, en especial al considerar que hubo desde Turquía hacia Siria todo tipo de influencia desestabilizadora". Más adelante, señaló que "desde hace ya veinte años y en forma totalmente unilateral e injusta, Turquía mantiene cerrada la frontera con Armenia". "Ya es tiempo de que Turquía haga un revisionismo de su historia y acepte su responsabilidad en la planificación y ejecución del primer genocidio del siglo XX", añadió el Vicepresidente del organismo.
En cuanto al conflicto de Siria, la IS postuló que "la tarea más urgente sigue siendo terminar con la guerra civil que se cobró la vida de más de 100.000 sirios", ya que "mientras continúe el estado de guerra, desorden y anarquía, las condiciones de vida de los sirios continuarán deteriorándose y la tarea de reconstruir el país se hará cada vez más difícil". En este sentido, la IS planteó la necesidad de encontrar "una solución política que organice un gobierno transitorio capaz de llevar al país hacia la democracia".
Paralelamente, el Consejo reafirmó sus posturas previas sobre la paz en Medio Oriente, exigiendo "el fin de la ocupación israelí y el respeto a la autodeterminación del pueblo palestino", "la creación de dos Estados nacionales que coexistan en base a las fronteras de 1967, incluida Jerusalén oriental" y "que se ponga fin al bloqueo de Gaza".
Por último, los casi 100 partidos que participaron del Consejo emitieron una resolución con una variedad de premisas sobre la economía mundial, argumentando que se deben buscar "reformas estructurales orientadas al crecimiento sustentable" teniendo en cuenta que "la austeridad sin crecimiento conduce a un círculo vicioso de depresión, deflación y creciente endeudamiento".
Además, se concibió al desarrollo global como una de las formas para erradicar la pobreza y la exclusión social, ya que "es ética y políticamente inaceptable abandonar a estas millones de personas en la pobreza cuando tenemos el know-how, la tecnología y los recursos para ayudarlos a ayudarse a sí mismos y convertirlos en miembros de la comunidad mundial".
